Afloran muchos sentimientos cuando me pongo a editar el video. No solo veo a una novia y a un novio. Veo a un padre y a una madre que se le casa su hijo o hija. Veo una sonrisa de ella, o una mirada de el. Son unas sensaciones, y momentos que quedan grabados para siempre en el alma, y que tengo la suerte y el privilegio de haberlos podido recoger con mi cámara.

Boda celebrada en el Sagrario de la Catedral de Sevilla. La novia llegó 30 minutos más tarde de lo previsto. Nuestro despliegue de cámaras levantó la curiosidad de todas las personas que transitaban por la Avenida de la Constitución. Empezaron a concentrarse en la puerta ante la expectación levantada. Y cuando llegó la novia en el coche de caballos todo se volvió en clamor y aplausos ante la llegada de tanta belleza. Apareció la Princesa. Princesa por un día para todos nosotros, pero Reina para siempre en el corazón de Iván.